Toda la energía en estas galletas, sin gluten y sin huevo

Soy una fanática de las galletas, siempre antes de irme a dormir o por las tardes, me gusta comer una galleta, y no siempre son de las más sanas.

Así que buscando ingredientes de buena calidad nutricional, me salieron estas galletas, que se hacen en un plis plas y contienen cantidades de energía, y sin gluten, para que las puedan disfrutar todos.

Bueno pero que tiene de maravilloso estas galletas? almendra molida, harina de quínoa, arándanos, miel, creo que bien completitas.

Pasemos a los ingredientes.

Receta de galletas

Procedimiento

Ponemos en un bol la mantequilla pomada y el azúcar y batimos hasta obtener una crema

A esta crema le iremos agregando la almendra molida, la harina de quínoa, la maicena y la levadura química, vamos mezclando para obtener una masa, luego le agregaremos la miel los arándanos y los perfumes que nos gusten.

Yo use semillas de cardamomo unas 3 que abrí y saque las semillitas pequeñas que hay dentro, una cucharadita de café de canela, una media vaina de vainilla y la ralladura de un limón , para que aporte un cierto grado de acides.

A estas alturas tendremos una masa un poco pegote, la volcamos sobre la mesa de trabajo y la amasamos con suavidad hasta terminar de integrar todo, nos ayudaremos con un poco de maicena, para que no se nos pegue.

Hacemos un cilindro de unos 7 cm de diámetro o del tamaño que más les guste,

Lo envolvemos en film y lo llevamos a la nevera por el termino de 1 hora, que tome consistencia, pero que no este duro.

Para formar las galletas tenemos dos opciones, la más fácil con un cuchillo cortamos directamente rodajas del cilindro o hacer un bollito y luego aplástalo con la mano.

No es una masa que nos permita mucha manipulación, dado que no tiene gluten, que es el que le da la elasticidad.

Las ponemos en una bandeja de horno algo separadas, aunque no crecen mucho, y las cocinamos en horno 180 grados hasta que estén doraditas, si las quieres mas tiernitas las dejas mas blancas.

Dejarlas en la bandeja del horno unos 10 minutos antes de ponerlas sobre una rejilla para que terminen de enfriar, porque si no se les romperán. No sean ansiosas.

Si las dejamos descansar de un día para otro, serán más ricas aun.

En una lata te pueden durar una semana, si llegan.

Como les digo siempre, espero que las hagan y disfruten en familia o con los amigos o con quien les apetezca.

Saluditos y hasta la próxima.

Alicia